Diálogo de Mujeres Afroperuanas
El 10 de abril del 2008, nos reunimos 42
Mujeres Afroperuanas integrantes de diversas Instituciones, ONG, Organizaciones
Sociales de Base así como también Mujeres Afroperuanas identificadas y
comprometidas con una propuesta de cambio, compartimos la primera reunión del
Diálogo de Mujeres Afroperuanas.
El objetivo principal de la convocatoria fue:
“Constituir un
espacio de Diálogo, Análisis, Reflexión y Acción de las Mujeres Afroperuanas y
para las Mujeres Afroperuanas” Constituirnos en un espacio de voz, alerta, dado
que hasta el momento las Mujeres Afroperuanas, no teníamos un espacio de
expresión que ponga en conocimiento de la sociedad peruana, no solo la
problemática que nos aqueja a nosotras como Mujeres Afroperuanas si no que
sobre todo se planteen alternativas de solution viables a nuestra situación de
desventaja social, económica, laboral y educativa que tenemos que afrontar con
un total abandono e indiferencia del Estado Peruano. El espacio del Diálogo no
hubiera podido cumplir con su objetivo de no haber sido por la participación de
todas y cada una de las asistentes
Las
Participantes Manifestaron:
El evento era
necesario, porque no existía desde la organización de las Mujeres Afroperuanas
un Diálogo sobre nuestros problemas que plantee alternativas de solución a las
mismas.
La necesidad de
contar con un espacio de trabajo en la medida que permite la interacción de
todas las Mujeres Afroperuanas, independientemente del oficio y trabajo que
realicen.
Apostar por un
colectivo que visibilice el trabajo de las Mujeres Afroperuanas.
Incidir en las
políticas públicas: proponiendo propuestas viables de una verdadera Integración
Social, así como incorporándose a las ya existentes.
Incidir en
espacios políticos para sustentar y hacer validas nuestras propuestas,
necesidades y demandas.
Conformar de
redes, que fortalezcan el trabajo de las Mujeres Afroperuanas.
Somos víctimas
de discriminación, marginación y exclusión frecuentes en los medios de
comunicación, centros laborales y educativos lo cual afecta considerablemente
nuestra Identidad y Autoestima, y se necesita que la sociedad comprenda que
todos somos peruanos y debemos vivir en armonía y tranquilidad, y que el Estado
Peruano emprenda acciones que funcionan una buena convivencia entre todos los
peruanos.
Apostar por la
peruanidad es buscar la Identidad Afro, somos parte esencial de la Identidad
Nacional del Perú.
PREÁMBULOS
Nosotras, la
Red de Mujeres Afrolatinoamericanas, Afrocaribeñas y de la Diáspora, somos un
espacio de articulación para la lucha contra el racismo, el sexismo, la
discriminación racial y la pobreza.
Impulsamos la
consolidación de un movimiento amplio de mujeres afrodescendientes, que
incorpora las perspectivas étnicas, raciales y de género en su quehacer,
visibilizando la realidad de la discriminación y la violación de los derechos
humanos que vivimos, en el ámbito socioeconómico, político y cultural.
La Red se
propone incidir en instancias gubernamentales e intergubernamentales para la
formulación e implementación de políticas públicas que funcionan la
construcción de modelos de desarrollo, sustentados en el reconocimiento y
respeto de las identidades étnicas y raciales.
En el marco del
modelo de desarrollo vigente, en la mayoría de los países latinoamericanos y
caribeños, la situación de pobreza de las afrodescendientes se agrava por la
falta de acceso y control de los recursos económicos y naturales, a lo cual se
añaden las escasas oportunidades a empleos de calidad con remuneraciones
justas, de acuerdo a su formación, habilidades y experiencia.
La falta de
formación adecuada y desarrollo de habilidades en materia de emprendimientos
productivos y económicamente sustentables, los rigurosos criterios de selección
para la concesión de créditos y financiamientos, factores que se han convertido
en un obstáculo que imposibilita la participación plena en las diferentes
esferas económicas en nuestros países.
Las mujeres
somos un 53% de la población afrodescendiente en la Región Latinoamericana y
del Caribe y debido a las condiciones de discriminación étnico-racial y de
género y los factores negativos mencionados, tenemos una sobrerrepresentación
entre los grupos de mayor pobreza y vulnerabilidad con indicadores bajos de
acceso a la educación, a los servicios de salud, vivienda, salubridad y acceso
a recursos económicos que destinar a nuestra autonomía en la sociedad .
La mayoría de
los Estados de la Región, más allá de firmar y ratificar convenios, acuerdos y
tratados de diversa naturaleza, no han tenido un accionar que refleje su
compromiso de aportar al cambio en las condiciones de vida, de participación y
acceso a los recursos económicos y naturales de las mujeres afrodescendientes,
a través de políticas públicas con étnico racial y de género, manteniendo esta
manera, la situación de marginalidad e invisibilidad de las mismas .
Por todo esto,
nos preguntamos, en el marco de la Undécima Conferencia Regional de la Comisión
Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) ¿Qué Estado queremos y para
qué igualdad? en ese sentido, declaramos y proponemos los siguientes puntos que
forman parte de nuestra agenda.
DECLARAMOS
Que el sistema
capitalista ha incorporado a las afrodescendientes como mano de obra, con poco
valor, al mercado laboral ya la producción, dependiente en la división sexual
del trabajo, en los estereotipos de género, en la subordinación femenina y en
las desigualdades raciales y de clase. Esto tiene como consecuencia, además de
la marginación económica, la exclusión social, en muchos casos también su
desvinculación del territorio, convirtiéndola en trabajadora asalariada
migratoria, tanto a lo interno de su país, como a nivel.
Que no puede
concebirse un Estado plenamente democrático sin justicia social. Que las
discriminación étnico-racial y de género son constitutivas de la pobreza, la
exclusión y de la perpetuación de las desigualdades sociales históricas.
Los Estados de
la Región deben reconocer que el tráfico y la trata de personas africanas
esclavizadas durante la época colonial tiene efectos transgeneracionales a
partir de la acumulación de desventajas para las personas afrodescendientes en
general, profundizándose en las mujeres afrodescendientes en particular.
Mantener esos efectos através de las instituciones y organización actual de los
Estados les hace párticipes hoy día de la injusticia y desigualdad en la vida
de los y las afrodescendientes. Este reconocimiento es condición previa para la
implementación de políticas públicas de acción afirmativa imprescindibles para
un desarrollo sustentable de las poblaciones afrodescendientes.
Que los pueblos
y personas afrodescendientes se les ha degradado progresivamente, se les ha
asignado lugares simbólicos y materiales que les condiciona a permanecer como
mano de obra escasamente calificada para el ingreso en condiciones dignas al
mercado laboral y la producción. Esto se ha fundamentado en la división sexual
y racial del trabajo, en los estereotipos étnico-raciales y de género, en la
subordinación femenina y en la subalternización racial de las desigualdades de
género, posición económica y de clase.
Que a la
marginación económica de los y las afrodescenfientes se suma la exclusión
social y en muchos casos también la desvinculación del territorio.Muchas
mujeres afrodescendientes, a base de estereotipos, se emplean en el trabajo
doméstico, con las peores condiciones. Situación que es peor aún si es
inmigrante indocumentada y está expuesta a la trata y tráfico actual de mujeres
en las redes ilícitas internacionales con los vejámenes físicos y morales que
esto supone .
Que las
condiciones laborales a las que han sido sometidas las afrodescendientes
responden a un modelo económico que tiene como eje central un comercio
internacional y un crecimiento económico desigual, lo que sólo beneficia a los
grupos históricamente dominantes .
Quéese mismo
desarrollo económico y social, en su evolución de las últimas décadas, ha
suscitado nuevos planteamientos, gracias a las demandas de diversos grupos
sociales, los cuales apuntan a propiciar una mayor participación democrática,
fundamentada en la libertad, la diversidad cultural y la diversidadica , lo
cual demandamos étnicos que sea considerado e incorporado en nuestros modelos
de desarrollo implementados por Estados .
Que como Red de
Mujeres Afrolatinoamericanas, Afrocaribeñas y de la Diáspora entendemos que las
propuestas productivas derivadas del desarrollo económico vigente deben ser un
reflejo de los procesos creativos y culturales de los pueblos para mejorar y
diversificar la base productiva, tomando en cuenta las potencialidades locales
y regionales .
El desarrollo
económico al que aspiramos y demandamos debe validar e incorporar los saberes y
conocimientos ancestrales, recuperar los valores intrínsecos de los pueblos,
identificar y priorizar oportunidades sustentables, de igual manera, focalizar
la innovación tecnológica para el fortalecimiento de las capacidades de toda
índole , de las personas, y particularmente, de las mujeres afrodescendientes.
Que el Estado
que demandamos, en cada país de la Región, otorgue validez real a los
convenios, acuerdos y tratados de diversa naturaleza, que firma y ratifica en
el ámbito nacional e internacional, de tal manera que refleje su compromiso de
aportar al cambio en las condiciones de vida, participación y acceso a los
recursos de las personas afrodescendientes y, muy particularmente, de las
mujeres afrodescendientes. Que, según hemos suscrito en declaraciones
anteriores, demandamos fortalecer la vigencia y respeto de los derechos
sexuales y derechos reproductivos de todas las personas, sin discriminación de
ningún tipo.
Demandamos
particularmente asegurar a las mujeres afrodescendientes el acceso universal a
los servicios de salud sexual y salud reproductiva integral, así como a la más
amplia variedad de métodos anticonceptivos, incluido el acceso a la prevención,
diagnóstico y tratamiento para el VIH / SIDA.
Que debe
garantizarse el acceso a los servicios de salud de calidad y al aborto legal y
seguro, como condición necesaria para la reducción de la mortalidad y la
morbilidad materna.Igualmente a las adolescentes y jóvenes afrodescendientes
debe brindárseles las oportunidades que les tomarán decisiones libres,
responsables e informadas en todos los ámbitos que la calidad y trayectorias de
sus vidas, especialmente los relacionados con el acceso con el ejercicio de su
sexualidad, garantizándoles el a la educación en sexualidad, una información
sobre todos los métodos anticonceptivos y el acceso a los de su elección.
Que las
afrodescendientes demandamos un compromiso del Estado con la igualdad y la
implementación de políticas públicas con perspectiva étnico- racial y de género
con el propósito de erradicar la marginalidad e invisibilidad en que nos
encontramos .
Proponemos que:
Los Estados
implementen políticas públicas que promuevan la autonomía económica de las
afrodescendientes, teniendo en cuenta el acceso a los recursos económicos y
naturales, como la tierra y el agua, al crédito y al empleo y la protección del
mismo, en el contexto de los acuerdos comerciales interregionales e
intrarregionales y, particularmente, en la crisis financiera actual .
Que los Estados
desarrollen e implementen medidas y acciones positivas, contempladas en los
diferentes tratados y convenciones, que garanticen la integración de las
mujeres afrodescendientes al mercado laboral de forma plena, asegurando la
calificación técnica, profesional y la consiguiente adecuación salarial de la
fuerza laboral femenina, sin discriminación alguna, lo que permitirá reducir
las brechas basadas en la etnia y el género.
Que los
Estados, entre las acciones positivas, promuevan la creación y acceso a
programas de emprendimiento empresarial para la incorporación de las mujeres
afrodescendientes en la economía; el fortalecimiento de sus iniciativas
económicas; la creación de redes empresariales;empresas asociativas y otras
formas de organización de las mujeres con base en una comercialización con
justicia y equidad.
Que los Estados
implementen un sistema de seguridad social equitativo y sin discriminación
étnico-racial y de género, que garantice los derechos de las trabajadoras
afrodescendientes y aseguren que los / as empresas / as cumplan con sus
obligaciones, en el marco de las normativas laborales establecidas .
Que los Estados
desarrollen programas para proteger la salud integral, sexual y reproductiva de
las mujeres afrodescendientes, así como fomentar el respeto a sus derechos
sexuales y reproductivos.
Que los Estados
amplíen la cobertura del sistema de salud para todas las mujeres
afrodescendientes, a través de servicios integrales de calidad, así como
garantizar criterios étnico, raciales y de género, en los planes para lograr
los Objetivos de Desarrollo del Milenio dedicados a salud, en particular la
reducción de la mortalidad materna.
Que los Estados
implementen políticas públicas para facilitar a las mujeres el acceso a la
tierra y su titulación; acceso a los recursos económicos y naturales, incluidos
los bosques y el pago de incentivos forestales, motivando de esta manera el
manejo y uso adecuado de estos recursos.
Que los Estados
difundan, multipliquen y sistematicen experiencias exitosas de empoderamiento
económico de las mujeres en materia de seguridad alimentaria y combate a la
pobreza.
Que los Estados
se comprometan con la creación de indicadores sociales y económicos, en los
censos nacionales, con desagregación étnico-racial y por sexo, en los países
que aún no lo han hecho, como insumo obligatorio para el diseño e
implementación de políticas públicas que favorezcan a las mujeres
afrodescendientes.
Que los
Estados, se comprometan a través de la realización de estudios y encuestas
brindar información confiable y exhaustiva de la población, desagregada por
edad, etnia, sexo / género y procedencia geográfica.
Que los Estados
inviertan recursos en la producción sistemática de datos estadísticos que
incluyan indicadores étnico-raciales, sexo, género y procedencia geográfica,
tanto en los censos como encuestas y cualquier estudio que se use para el
diseño de políticas públicas, planes y programas. Esto evaluará su impacto en
la situación de los y las afrodescendientes en general. Para el logro de la
eficiencia en los planes para el desarrollo, debe tenerse en cuenta también la
Declaración de París (2005) y el Programa de Acción de Accra (2008) para lograr
la canalización de los recursos de la cooperación internacional dando énfasis y
atención especial a las mujeres, las niñas, las adolescentes y los jóvenes
afrodescendientes.
Que dentro de
la estructura gubernamental se cree un espacio sobre las afrodescendientes, con
la estructura y los recursos necesarios para garantizar la defensa de nuestros
intereses y la producción de información sobre nuestras condiciones de vida,
permitir, de esta manera, el diseño e implementación de políticas públicas que
funcionan el pleno ejercicio de la ciudadanía en condiciones de igualdad.
Que la
Organización de Naciones Unidas y la Organización de Estados Americanos han
declarado el año 2011 como “Año Internacional de la Población
Afrodescendiente”. Los Estados deben impulsar acciones concretas que durante
este año reflejen la voluntad política real de enfrentar las condiciones de
marginalidad y pobreza en que viven la mayoría de los pueblos y personas
afrodescendientes.
Dado en la
ciudad de Brasilia a los 16 días del mes de julio 201 Dado en la ciudad de
Brasilia a los 16 días del mes de julio 2010 .